lunes, 2 de noviembre de 2009

La mente.

-¿Te gustan más los hombres que las mujeres?
-¿En general dices? No. De qué sexo sean en realidad me da igual, es lo que menos me importa. Me puede gustar un hombre tanto como una mujer. El placer no está en follar. Es igual que con las drogas. A mí no me atrae un buen culo, un par de tetas o una polla así de gorda; bueno…, no es que no me atraigan, claro que me atraen, ¡me encantan! Pero no me seducen, me seducen las mentes, me seduce la inteligencia, me seduce una cara y un cuerpo cuando veo que hay una mente que los mueve que vale la pena conocer. Conocer, poseer, dominar, admirar. La mente, Hache, yo hago el amor con las mentes. Hay que follarse a las mentes.

Martín (Hache)

6 comentarios:

OjosMiel. dijo...

Enamorse de una mente...
Muy poca gente lo hace, y es una verdadera pena.

Ainhoa P. dijo...

Cuando te enamoras de una persona, tienes que mirar mas allá de la fachada, porque dos personas necesitan entenderse, no solo en la cama, si no más bien en la vida diaria y para eso un cuerpo no es solo suficiente, se necesita lo que hay dentro de él.

Un beso.

Laura dijo...

Gran película, sí... y grandes frases.

¿A qué te dedicas? Veo que hablas de la educación... Yo soy estudiante de E.Social. :)

Me has firmado en otro blog, pero shhh es un secreto! =)

Estela Rengel dijo...

Es que se me ponen "a huevo" ciertos comentarios con estas cosas, jajaja!
Muchas canciones que tengo en mi iPod son de la serie, me suelen gustar la mayoría de canciones que salen en la serie y gracias a ella he descubierto algunos grupos que me encantan.

Un abrazo. ^^

Estela Rengel dijo...

Gracias por pasarte. Estoy contigo en lo que dices, aunque la entrada no va solo de que te juzguen sino de que lo hagan por partes sin darse cuenta de que somos un todo...

Y lo de Lena Headey también lo suscribo, es jodidamente preciosa y también me enamoré de ella en Rosas Rojas, pero quería ponerle el punto bollo a la actualización con Piper. xDDD

Un beso. ^^

Seo dijo...

es que la persona es mas que un cuerpo y a veces esa mente no va en el envoltorio que uno se espera